lunes, 7 de julio de 2008

Ni con unos ni con otros, con el pueblo

Por Carlos "Perro" Santillán - Movimiento Tupaj Katari - Comisión de Derechos Humanos de la Capital de Jujuy

Estamos contra la represión, porque conocemos la represión. Porque hace dos o tres semanas sufrimos en carne propia las balas, los gases y los golpes de la policía de la Provincia de Jujuy. Y hace días los argentinos se conmovieron con el desalojo de la intendencia de la ciudad de La Quiaca.

Cómo no vamos a estar contra la represión, si en los cortes murieron Kosteki y Santillán, Aníbal Verón, Teresa Rodríguez, Víctor Choque, los compañeros de Mosconi, y tantos otros que quedaron con secuelas de represiones y cárceles sufridas durante décadas y décadas. Por eso no estamos con la represión.

Pero tampoco estamos con la oligarquía, que hace lo que quiere con el pueblo argentino. Desabasteciéndolo, de productos esenciales para la vida y atribuyéndose la representación del campo y todo el pueblo argentino. Decimos, que el gobierno tiene que grabar a los que más se beneficiaron con el modelo neo liberal; sean los terratenientes o las compañías agroexportadoras, también a las mineras, a las petroleras, a las pesqueras, a los peajes de Macri y compañía y a todos aquellos que se siguen enriqueciendo con un modelo que en los hechos no terminó.

Seguimos siendo la variable de ajuste los trabajadores: los trabajadores en negro de las estancias, de los desiertos de sojas, los trabajadores que cobran planes trabajar de 150 pesos, y de aquellos que tenemos miserables salarios que no alcanzan para llegar a mediados de mes.

Decimos al gobierno que para hacer cierto lo que ellos llaman redistribución tienen que romper con el modelo clientelista de repartir selectivamente y a sus amigos. La acción social tiene que ser universal y las retenciones de los grandes tienen que servir para garantizar la soberanía alimentaria de nuestro pueblo, sacando el impuesto más regresivo y terrible que ha sufrido el pueblo argentino, el IVA a los productos alimentarios y a todos los remedios.

Si esto sucediera, podríamos decir que hemos empezado a virar el rumbo con los vientos que vienen de latinoamérica llámese Bolivia, Venezuela, Ecuador, Paraguay.

No es como algunos dicen, que los que no estamos con el campo, estamos con el gobierno. Nosotros vamos a seguir luchando por los cambios revolucionarios que necesita nuestro país sin confiar en este gobierno, pero menos en los representantes de la oligarquía que agrupa a toda la derecha más recalcitrante y golpista de la Argentina.

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